martes, junio 21, 2005

De la necesidad de las mismas normas para todos.

Había pensado en titular esta entrada como Aquí o follamos todos o la puta al río, pero luego pensé que una de las pocas vulgaridades que integran mi léxico más o menos normal, me iba a acarrear críticas. Luego creí oportuno sustituirla por el consabido O todos moros o todos cristianos, pero realmente a pesar de ser un prueba de nuestro refranero más popular no llega a alcanzar la capacidad sígnica de la primera expresión. Así que he optado por pasar de títulos originales, y reducir a lo que creo que es una necesidad perentoria de la UAP de cara al futuro, máxime con lo sucedido el día de hoy.
Me refiero indudablemente a la avalancha de "hola es que he perdido la tarjeta de selectividad" ¿de verdad que la has perdido? "bueno, es que yo la he buscado y no la encuentro, debajo de la Ragazza de esta semana no está.
El alto comité de uaperos adoptó como procedimiento a seguir ante lo que obviamente es una muestra más de la pachorra de la gente para con sus propios asuntos (de hecho tenemos todavía una colección de tarjetas que después de emitidas no han tenido quién las reclame a pesar de que se haya llamado por teléfono a los interesados) la estrategia de atemorizar con lo complicado del proceso de emisión de un duplicado y en algunos casos requerir a los solicitantes que volvieran a casa, miraran bien y si después de todo seguían sin encontrarlas, que nos llamaran. Es ésta una estrategia efectiva, ya que de tres personas a las que le dijimos eso, sólo una volvió a llamar.
Sin embargo, en el día de hoy el que suscribe ha presenciado una intolerable vulneración de esta norma no escrita a cuenta del caso concreto de un chaval al que la Uapera I (con la inestimable condescencia de la Uapera L) no ha puesto mayor impedimento a su solicitud de duplicado de tarjeta, de hecho al margen de esquivar la baba que se le caía a cuenta de la constitución física y antropométrica del chaval ha rellenado los datos de manera rauda, para acabar con un "no hay ningún problema, cuando la tengamos te llamamos" (para acto seguido discernir si tenía necesidad de anotar su número de teléfono en otro tipo de soporte -v. gr. una agenda artesanal del mercado negro de los bolsos belgas- más allá del inicuo trozo de papel por el que la UAP ha tenido que sustituir a los ya extintos postis de la UAP). Podría decirse que para la uapera I, por lo visto, hoy se ha convertido en una fecha importantísima que lleva al olvido (tal y como ella ha confesado: "no me preguntes por nada que se remonté a más de cinco minutos porque no me acuerdo" toda la historia posterior a 1789, marcando quizá para ella el comienzo de una nueva edad histórica tras la Antigua, Media, Moderna y Contemporánea.
Ante estos hechos, considero que la constitución física, antropométrica o la coloración del iris del chaval de esta manñana (que el que suscribe no niega ni prejuzga en modo alguno) no debñia haber conllevado gabelas de ninguna clase de parte de una unidad que ha hecho de la efectividad en la gestión de incidencias y trámites su nota distintiva. En tal sentido, solicito nunca más las caracter´siticas del solicitante (más alla de las circunstnacias personales que alegue) deben servir de excusa para dispensar un trato de favor.
Uapero D

2 Comments:

Blogger aljofainas said...

También tenías a mano lo de "o jugamos todos o se rompe la baraja".

Y mira que lo dice una persona que está acabando una carrera sólo por no tener que buscar los papeles de selectividad (o lo que fuese) para cambiarse a otra.

Si tienes alguna duda sobre como tratar a los novatos, habla con el niño del Volga

22/6/05 01:36  
Anonymous Anónimo said...

Lo del Niño del Volga lo tengo muy presente, tú no veas las contestaciones que nos dio el otro día a mí y a Iria a propósito de los novatillos.

22/6/05 19:40  

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